Como ya sabéis falta un mes escaso para las elecciones. Desde hace un par de semanas atrás, varios mensajes publicados por distintos canales de comunicación se han ido transmitiendo y difundiendo a la plantilla. Algunos vienen de cara, encabezados por logos conocidos, otros prefieren la postura cómoda, cobarde y mezquina del anonimato.

         Los primeros especulan con que sus mensajes calen en cada uno de los trabajadores, buscando conseguir rentabilidad en las urnas; sueñan que podrán tener mayor representatividad en el Comité; piensan que lo que no hicieron en 4 años lo harán en 4 semanas; pretenden desfigurar la realidad en una docena de líneas escritas en un folio; creen que el conjunto de los trabajadores no es consciente de la situación por la que está pasando nuestra fábrica y el Grupo al que pertenecemos...

 

         Los segundos, los que viven anquilosados en posturas arcaicas, se desacreditan a sí mismos con sus formas y maneras, propias de grupos sectarios. Los que son incapaces de respetar las ideas de otras personas, esos, solo merecen ser ignorados y olvidados. Intentan utilizar la campaña electoral como unción milagrosa con la que taponar la hemorragia de las heridas que el paso de los años les ha dejado, heridas personales, individuales e intransferibles, las cuales utilizan para odiar a todo y a todos. Imposible será que estos individuos puedan llegar algún día a pilotar las relaciones sociales con esta empresa y los intereses de sus trabajadores.

         En lo que queda de mes, desde el Sindicato Independiente también repartiremos informaciones, folletos, os convocaremos a algún acto electoral, publicaremos las candidaturas, etc, pero tenemos el sosiego y la seguridad de saber que el grueso de nuestra campaña ya es conocido por todos vosotros. No es otro que el conjunto de acciones desarrolladas en 32 años de presencia mayoritaria en el Comité, donde siempre se ha velado por el empleo, por consolidar mejoras sociales y por la viabilidad de la empresa, negociando las acciones necesarias acordes con la coyuntura económica e industrial de cada época.

Desde el SIT-FSI tenemos la tranquilidad que da el haber trabajado con coherencia y transparencia. No habrá en nuestro sindicato mensajes o eslóganes inéditos que no conozcáis a día de hoy, no habrá sorpresas ni anuncios de escaparate barato, porque en nuestra filosofía de actuación no hay cabida para ellos. Aquí solo tiene cabida el trabajo honesto, la credibilidad y la independencia que llevamos en la esencia de nuestras siglas.